Para hacer una tarta en un molde desmontable de diámetro de 24 cm. Si utilizáis un molde de diámetro mayor, saldrá una tarta más bajita. También necesitaremos papel especial parafinado de horno.
INGREDIENTES:
Para la base
- 1/4 kg de galletas tipo "María dorada"
- 100 gr. de mantequilla a temperatura ambiente.
- 30 gr. de cacao en polvo.
- 1 copita de vino moscatel (50 gr)
Para el relleno
- 500 ml de leche semidesnatada
- 80 gr. de azúcar
- 80 gr. de harina de maíz
- 40 gr. mantequilla5 láminas de gelatina
- 10 caramelos de menta
- 500 gr. de nata para montar especial postres
- 2 cucharadas de azúcar.
- Chocolate negro para adornar (triturado)
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Lo primero, es forrar la base del molde con papel especial de horno y engrasar con mantequilla los laterales.
Triturar las galletas (yo las trituro con la picadora hasta dejarlas como harina) y mezclarlas con la mantequilla, el vino moscatel y cacao en polvo. Mezclar todo bien y extender esta masa por la base del molde, igualar toda la base. (yo me ayudo de la mano del almirez para repartir y apretar la masa por todo el molde). Introducir el molde en el frigorífico para enfriar.
A continuación montamos la nata (se monta mejor si 5 minutos antes de la preparación, introducimos el bol que vamos a utilizar en el frigorífico para que esté frío y el brick de nata en el congelador). Con el bol ya frío echamos la nata, y con la batidora de varillas, la montamos, cuando veamos que empieza a espesar, echamos las dos cucharadas de azúcar y seguimos batiendo. Sabremos que ya está montada cuando empieza a amarillear y al sacar la batidora, la nata se queda en las varillas. (cuidado con batir mucho que se nos puede hacer la nata mantequilla). Reservamos en el frigorífico.
Vamos a hacer la crema de menta:
Hidratar las láminas de gelatina, poniendo un plato con agua fría e introducirlas durante 5-7 minutos.
Triturar con la picadora los caramelos y reservar.
En un cazo, mezclar la leche con la harina de maíz hasta que quede disuelta, añadir el azúcar, la mantequilla y los caramelos; poner al fuego ,cuando esté templada, introducir la gelatina bien escurrida y removemos continuamente la mezcla, hasta que espese. Retirar del fuego, poner la mezcla en un bol y dejar enfriar.
Cuando la crema esté fría, sacar del frigorífico la nata montada y la mezclamos con la crema a cucharadas en forma envolvente.
Sacamos el molde del frigorífico, echamos la mezcla, volvemos a meterlo en el frigorífico y lo dejamos reposar al menos 6 horas para que cuaje la crema.
Antes de servir, echar el chocolate negro por encima, desmoldar, poner en una fuente.
Parece laboriosa, pero no, ya veréis que buena está.