sábado, 26 de marzo de 2016

Burgos. Lerma

OFICINA DE TURISMO
Dirección: Calle de la Audiencia, 6
Horario: De 09:00 a 14:00 y 16:00 a 19:00 horas. Sábados 10:00 a 13:00 Domingos tarde  y lunes: cerrado
Teléfono: 947 17 70 02


VISITAS GUIADAS de Martes a Sábado 10.30 h - 12.00 h - 17.00 h Domingos: 10.30 h - 12.00 h. Salidas desde la Oficina de Turismo. 
Los sábados de Marzo y Abril las Visitas Guiadas comenzarán por la tarde a las 16.30 h por motivo de las visitas al Subsuelo de Lerma "Descubre otro Lerma bajo tus pies"

Precio de la visita: 4 €/persona.
Descubre otro Lerma bajo tus pies: 12 marzo 5€/ persona

 UN POCO DE HISTORIA
La fundación de Lerma fue por una tribu celtibérica (vacceos) y a lo largo de su historia han pasado romanos, suevos, visigodos y árabes hasta que alrededor del año 900 con la reconquista, el avanc
e cristiano sitúa su frontera en el río Arlanza, instalando una fuertes y castillos, entre los que se encontraba Lerma porque era encrucijada de caminos. Lerma fue amurallada, con 4 puertas.

Desde el siglo XI, Lerma fue un condado disputado por los Castro y los Lara , hasta que extinguido el linaje de los Lara, la villa pasó a formar parte de las propiedades del rey. En 1574, D. Francisco Gómez de Sandoval y Rojas, recibió el mayorazgo de la casa como IV Conde de Lerma y V Marqués de Denia. en 1599 Felipe III eleva el condado a Ducado, dejando a esta villa como cabeza de los estados integrados en el Ducado.

Francisco Sandoval y Rojas - primer Duque de Lerma, se educó en la corte de Felipe II, ganándose la confianza del heredero -Felipe III.
Cuando Felipe III, llegó al trono, le nombró primer ministro. Se hizo inmensamente rico a costa de manejar el tráfico de influencias, la corrupción y la venta de cargos públicos. Quiso hacer de Lerma un segundo Escorial, una corte de recreo donde acudieran personajes relevantes, artistas e incluso el rey. Para ello, empleó gran parte de su fortuna en engrandecerla y embellecerla contratando a los mejores arquitectos y utilizando los mejores materiales. (el Palacio Ducal, la Plaza Mayor de Armas con sus edificaciones, seis monasterios y una Iglesia Colegial, aparte de reparaciones en otros edificios; también estableció una industria de paños y tintes, una imprenta con licencia real, y un hospital).
Consiguió trasladar la Corte de Madrid a Valladolid entre 1601 y 1606, no sin antes comprar -6 meses antes de su traslado- propiedades que luego las vendió incluso al rey para su propio beneficio. El regreso de la Corte a Madrid, también fue por influencia del Duque; se sabe por documentos que se conservan que ya en 1603 realizó cierta maniobras y acuerdos con el alcalde de Madrid.
La reina Margarita -esposa de Felipe III- y otros consejeros descontentos hicieron que se pusieran al descubierto el entramado de corrupción e irregularidades, ante la cual el duque, solicitó de Roma el capelo cardenalicio que se le concedió en 1618, para ponerse a salvo de represalias.  En 1620, el rey Felipe III, le ordenó retirarse a sus propiedades en Lerma.
Cuando le fue concedido el cardenalato corrió por Madrid una coplilla que decía: «Para no morir ahorcado, el mayor ladrón de España, se viste de colorado». El duque murió en 1625.
Lerma, durante la Guerra de la Independencia fue ocupada por las tropas francesas, incendiando el palacio, saqueando conventos...; con la desamortización de Mendizábal, de los 6 monasterios, quedaron 3 deshabitados.
Hoy en día, Lerma se nutre del turismo, con el Parador Nacional, las empresas de embutidos, el textil (Amaya Arzuaga) y los vinos de D.O. de Ribera del Arlanza.
QUÉ VER
(1) Palacio Ducal
El duque, aprovechó el emplazamiento del antiguo castillo para construir el palacio. Fue construido en varias fases, concebido para morada de los duques y aposento para la corte de Felipe III cuando iba a Lerma.
(Dentro del parador, muro del antiguo castillo)
Presenta planta rectangular y gobernado por cuatro torreones -característica inequívoca de la época de los Austrias- con un patio interior rodeado de galerías columnadas, en dos cuerpos; el primero de 20 columnas de orden dórico con arcos de medio punto y el segundo con 20 columnas de orden jónico. Desde este patio arranca una suntuosa y amplia escalera claustral. Los torreones están rematados con chapiteles cubiertos de pizarra con gran bola, veleta y cruz.
La fachada principal de 3 cuerpos, rematada con una cornisa de piedra y por encima las cubiertas de pizarra con buhardillas.
El palacio consta de 210 balcones de hierro y 135 ventanas entre buhardillas y rejas.
Su portada, con un frontispicio semicircular y una columna con capitel en cada lado. Por encima de este y a los lados de un balcón, los escudos de armas de Sandoval y Rojas.
El palacio fue utilizado como cuartel general para las tropas francesas, perdiendo sus chapiteles. En la Guerra Civil fue prisión del bando nacional. En los años 70, parte del palacio se utilizó como fábrica de paños y alfombras. Luego fue restaurado para utilizarlo como Parador Nacional de Turismo.

(2) Plaza Mayor
Frente al palacio hay una plaza de planta rectangular; su tres lados restantes están ocupados por edificios porticados con 75 columnas de piedra y una planta superior de ladrillo con 72 balcones. Tiene una superficie de 6.862 m2 y en la actualidad es una de las plazas más amplias de España. En su origen estuvo totalmente fortificada y fue escenario de multitud de fiestas palaciegas (corral de comedias, juego de cañas, luminarias...) Lope de Vega o Góngora acudían a Lerma a representar sus obras teatrales. 
Uno de los juegos que el Duque ideó para divertimento de sus cortesanos era que una vez lidiado un toro, era incitado a llegar hasta un balcón y éste moría desnucado precipitado por la pendiente hasta el río.
(las flechas señalan donde estába el portón por donde pasaba el toro)
Plaza de Santa Clara
Esta plaza contiene el Monasterio de Santa Teresa, el convento de Santa Clara, el mirador de los arcos y en el centro, la tumba del cura Merino.
Desde 1968 se encuentra la tumba del cura D. Jerónimo Merino Cob, nacido en Villoviado -pueblo a 7 km de Lerma- que se convirtió en feroz guerrillero contra los franceses en la Guerra de la independencia y después, repuesto Fernando VII, en ayudar a éste y a los Cien Mil Hijos de San Luis a eliminar a los traidores liberales que querían restaurar la Constitución de 1812. 
Al morir Fernando VII, volvió a empuñar las armas en la 1º Guerra Carlista a favor del pretendiente, hermano del rey D. Carlos Mª Isidro. Finalizada la guerra, tuvo que exiliarse en Francia, en la localidad normanda de Aleçon donde volvió a ponerse la sotana para convertirse en el director espiritual y confesor de un convento de monjas. Murió en 1844.
(3) Convento de la Ascensión o Santa Clara
Este convento para monjas clarisas fundado en 1604 por el hijo del duque D. Cristóbal y su esposa Mariana de Padilla. La iglesia con planta de cruz latina es de gran sencillez, en su cripta eran enterradas las religiosas hasta 1891. El crucero tiene bóveda rebajada y está adornada con los escudos de los fundadores.
Antes de la reja que delimita la zona de clausura, hay cinco lienzos del pintor florentino  Bartolomé Carducho, que por entonces era el pintor de cámara de Felipe III, y un retablo con las figuras de San Francisco y  su discípula Santa Clara. Este convento estaba conectado por un pasaje con la Colegiata de San Pedro, para que las monjas pudieran pasar sin ser vistas a cumplir con sus obligaciones religiosas.

En la parte baja del coro destaca un magnífico relicario, con esculturas realizadas por Lesmes Fernández del Moral, con un bello Cristo Yacente de Gregorio Fernández, uno de los mejores imagineros de la Escuela Castellana.
Hasta finales de 2010 lo han habitado las monjas franciscanas clarisas, que en esa fecha pasaron a llamarse "Iesu Communio", nuevo Instituto religioso bajo el amparo del Papa Benedicto XVI, manteniendo la vida contemplativa; en su nuevo carisma, ocupa lugar principal la evangelización de los jóvenes.
Realizan trabajos de repostería que se pueden adquirir en el torno del monasterio.


(4) Pasadizo ducal
En 2007 se inauguró el nuevo "Pasadizo de los Arcos"; el pasadizo se creó a comienzos del siglo XVII y unía el Palacio del Duque con la Iglesia Colegial de San Pedro Apóstol. Hoy día el tramo visitable es la unión de los Monasterios de Sta. Teresa y Sta. Clara en el Mirador de los Arcos, que es el único tramo conservado de las galerías cubiertas construidas en 1609, que unían el palacio ducal con las iglesias y conventos de la localidad para que el duque, el Rey y sus más allegados, pudieran desplazarse a los distintos oficios sin pisar la vía pública.
Este espacio hoy alberga una instalación audiovisual que explica la personalidad del Duque, las características de la época y la relevancia de la villa así como la pérdida del favor real al duque, las sátiras políticas y las habladurías de sus conciudadanos.
(5) Excolegiata de San Pedro.
(sólo se ve el interior con la visita guiada)
Se consagró en 1617 con grandes festejos para la Corte y los nobles, que duraron 13 días. El duque consiguió que esta abadía dependiera directamente de Roma.La fachada típica herreriana destaca por la monumental portada principal, con dos columnas dóricas sujetando un entablamento decorado con los escudos ducales en las metopas, coronado por cornisa rematada por bolas. En el centro, una hornacina con frontón semicircular y la imagen de S. Pedro. Como curiosidad, destaca la puerta que es la original de 1616 de madera de pino y con clavos de bronce.
El bello retablo mayor es de estilo barroco, con abundante decoración, toda ella dorada, columnas salomónicas, decoración vegetal, estípites, amorcillos. En el interior destaca por su belleza y solemnidad la estatua orante del tío del Duque, Don Cristóbal de Rojas y Sandoval realizada en bronce por Juan de Arfe y finalizada por Lesmes Fernández del Moral. También destacan los famosos órganos de 1615-16, construidos por Diego de Quijano, Organero mayor de Felipe III.
Dentro de la excolegiata, podemos ver 3 cuadros del Duque de Lerma, que reflejan la coplilla: 
«Para no morir ahorcado, el mayor ladrón de España, se viste de colorado»; el primer cuadro, el duque en su esplendor; 2º cuadro, de cardenal y 3 cuadro en su muerte. 

(6) Convento de Santo Domingo
Empezó a construirse en 1613 y finalizaron las obras en 1617 trasladándose los frailes dominicos a su nueva residencia. Costó 20.000 ducados. En su fachada principal destacan los escudos de los Duques de Lerma y la imagen de Santo Domingo. Corona una magnífica espadaña.
Nunca llegó a ser un convento esplendoroso y los frailes abandonaron el convento con la desamortización de 1835. A partir de ese momento se utilizó como almacén, cuartel de la Guardia Civil y Instituto de Enseñanza Secundaria y Bachillerato hasta 2009. En la actualidad, es complejo de usos múltiples del Ayuntamiento.
(7) Monasterio de Santa Teresa
Saliendo de la Plaza Ducal, en la calle de la audiencia está este monasterio que se construyó en 1617 para los frailes carmelitas, asistiendo a su inauguración Felipe III y su Corte.
La iglesia presenta planta de cruz latina y su fachada está formada por 3 cuerpos, rematada con un frontón triangular; la hornacina central alberga una imagen de Santa Teresa, a los lados los escudos de la orden carmelita y de los duques de Lerma.
En la actualidad la iglesia se utiliza como Parroquia de Lerma de noviembre a mayo que los oficios pasan a la Excolegiata de San Pedro; el convento lo comparten las oficinas del Ayuntamiento y la Oficina de Turismo.

(8) Convento de San Blas.
Unido al Palacio, por un pasadizo volado de tres arcos hasta el S. XIX La fundación del monasterio dominico de San Blas fue la que proporcionó mayor orgullo de cuantas edificaciones religiosas levantó el Duque en Lerma. Al ostentar el patronazgo de la Orden y según las disposiciones del Concilio de Trento, trasladó en 1612 la Comunidad que habitaba en el Tovar (Cifuentes) a su villa.
En el centro, una hornacina con una talla del siglo XVII de San Blas con las reliquias del Santo en el pecho; muy veneradas el día 3 de febrero con la bendición de las roscas típicas de dulce o de pan En el crucero destaca el Cristo Crucificado, de la Escuela Castellana de Gregorio Fernández del S. XVII, y la Virgen del Rosario de gran belleza y calidad artística. La cúpula de media naranja y linterna, cuyos pilares duplicados levantan cuatro arcos torales con sus pechinas y con franjas entre recuadros y triángulos. La amplia pieza abovedada que se encuentra detrás de la Iglesia del monasterio acoge un valioso relicario donado por el Duque.

(9) Convento de la madre de Dios
Habitado en la actualidad por MM. Carmelitas Descalzas, de clausura.
Construido en 1608, está situado en el extrarradio, junto a la antigua N-I; fundado por motivos de carácter familiar por el Duque de Lerma, ya que como priora de su fundación entró la suegra de su primogénito, el Duque de Uceda, la condesa de Santa Gadea, doña Luisa de Padilla y Acuña.El convento es austero, clásico, monótono, sin casi elementos decorativos, como era norma en las obras del fraile carmelita. La Iglesia es de sencilla planta de cruz latina, con coro a los pies, y un retablo de orden clasicista, con columnas de estilo corintio. Destaca la talla de Santa Teresa del S. XVII, y la Virgen del Carmen existentes en La Iglesia del Monasterio. Sorprende la altura y sobriedad de los muros del monasterio.

(10) Casas medievales
Pasando el arco de entrada, llegamos al casco urbano medieval; la antigua plaza de la villa con sus típicos soportales, calle del Reventón, la Paloma, de Santa Caliopa o de José Zorrilla, donde poseía éste una casa que aún hoy se conserva. Al finalizar el S. IX Lerma se encontraba amurallada; y en el centro del caserío se levantaba la primitiva Iglesia de San Juan, hoy llamada Ermita de la Piedad, utilizada hoy como Museo.
(11) Arco de la Cárcel
La puerta principal de entrada de la antigua muralla medieval, llamada hoy Arco de la Cárcel, se compone de un arco torreado flanqueado por dos cubos defensivos con sus saeteras. El cuerpo superior de ladrillo es una ampliación realizada por el Duque de Lerma en 1610 para utilizarlo como cárcel. Atravesando el arco se encuentra la antigua plaza medieval de la villa, con típicos soportales junto a calles con encanto, como la de la Paloma, Santa Caliopa o la de José Zorrilla. El finalizar el siglo IX Lerma se encontraba amurallada y en el centro del caserío se encontraba la primitiva iglesia de San Juan Bautista, hoy llamada Ermita de la Piedad y utilizada como sala de exposiciones.
(12) Puente medieval
Con toda seguridad existió un primitivo puente, en el camino de Lerma a Burgos, que salvara el paso del río Arlanza. El nuevo puente no se levantó hasta la fortificación de la villa lermeña y una vez asegurada su firme posición amurallada. Se construyó con recios sillares de piedra y estaba provisto de sus correspondientes pilares tajamares y estribos. El Duque creó en la vega del río un precioso jardín, con huerta y coto privado de caza. Los jardines lo componían estanques con cisnes, cenadores, fuentes de alabastro, paseos cubiertos... 
Además el Duque construyó 7 ermitas que añadían devoción a la hermosura del parque. El Papa Paulo V en 1609 concedió a los fieles que orasen en cada una de estas ermitas, las mismas indulgencias que gozaban los que visitaban las siete Iglesias de Roma. En la actualidad podemos contemplar la del Humilladero, como único vestigio de la fastuosidad de los jardines.

Fin de la visita a Lerma

jueves, 24 de marzo de 2016

CALAMARES A LA MADRILEÑA

Esta es una receta muy facilita, y barata que para reuniones queda muy bien.

INGREDIENTES:

  • 500 gr. de anillas de calamar (pueden ser congeladas)
  • harina para rebozar
  • sal 
  • Aceite de oliva para freír.


******************
Si hemos comprado calamares, tendremos que limpiarlos y cortarlos en anillas, pero hoy día en las pescaderías ya nos venden las anillas y nos evitan este trabajo. Yo suelo comprar anillas de calamar o de pota, congeladas y siempre tengo en el congelador para cualquier eventualidad. Me han sacado más de una vez de un apuro.
Una vez tenemos las anillas preparadas, ponerlas en un escurridor o cedazo y lavarlas al chorro de agua fría. Echar sal, mezclar y ahora empezamos a echar harina removiendo constantemente hasta que las anillas queden cubiertas con una fina capa.
Poner a calentar con abundante aceite una sartén no muy grande. (Mejor en una sartén pequeña porque después de varias fritadas, la harina sobrante se va depositando en el fondo y el aceite se va ennegreciendo y depende de la cantidad que hagamos, tendremos que cambiar el aceite).Cuando esté el aceite caliente, introducir anilla a anilla procurando que no se peguen, y dejar freir hasta que estén doradas.

Sacar de la sartén y ponerlas en un plato en el que hemos puesto papel de cocina para que escurran el aceite sobrante.



Listo. Ya podemos comerlas, como aperitivo o ración,  o como en Madrid hacemos... ponerlas en un buen bocata.


Si queréis tomar el típico bocata de calamares en Madrid, alrededor de la Plaza Mayor hay multitud de bares que los sirven. Para mi los mejores son los que están junto al Parque de bomberos en la calle Botoneras.

Museo del Ferrocarril de Madrid

DATOS DE INTERÉS
Pº. de las Delicias, 61 
Entrada: general 6 €; Reducida 4 €; los domingos 2,5 € . Hay visitas guiadas a cargo de voluntarios. (preguntar en taquilla).
HorarioDel 1 de octubre al 31 de mayo, de lunes a jueves de 9:30 a 15:00 horas. Viernes, sábados, domingos y festivos, de 10:00 a 18:00 horas.
Del 1 de junio hasta el 30 de septiembre, de martes a domingos, de 10:00 a 15:00 horas.
Cómo llegarCercanías: líneas C1 y C10, estación de Delicias; Autobuses: 8, 19, 45, 47, 59, 85 y 86; Metro: línea 3, estación de Delicias. Resulta difícil aparcar el coche, porque toda la zona tiene estacionamiento limitado (zona verde)

UN POCO DE HISTORIA
La estación fue diseñada para la linea de ferrocarril de Madrid hasta la frontera con Badajoz. Esta linea se inauguró en 1879 y el edificio en 1880 con asistencia de Alfonso XII y Mª Cristina. En ese tiempo, los ferrocarriles estaban en manos privadas. En Madrid, estaba la compañía MZA (Madrid-Zaragoza y Alicante) con su estación de Atocha y La Compañia de los Caminos de Hierro del Norte de España (Madrid-Irún) con su Estación del Norte construida en 1882. La compañía MZA, compró la linea y quiso desacerse de la estación de Delicias porque ya tenía su estación de Atocha, pero finalmente, vendió la línea a la Compañía de los Ferrocarriles de Madrid a Cáceres y Portugal (MCP), que recién había terminado sus líneas y buscaba un emplazamiento en la capital. Así que en Madrid operaban 3 compañías.
Durante la Guerra Civil, las compañías abandonaron el país, dejando todo abandonado, y después de la guerra, con Franco, se aglutinaron todas las líneas de España, creando RENFE.
Esta estación fue cerrada al tráfico de viajeros en 1969 y al de mercancías en 1971. En 1984, se inauguró en esta estación el Museo del Ferrocarril de Madrid.

EL EDIFICIO
Proyecto del ingeniero francés Émile Cacheliçevre, su estructura metálica de la nave central fue construida en Bélgica y transportada a Madrid para su montaje. Su diseño seguía la tipología del resto de estaciones construidas por esa época en Europa, pero con la peculiaridad de situar el andén de llegada a un lado y el de salida al otro.
El edificio central, de 170 metros de largo, 35 metros de ancho y 22,5 de alto, está construido en hierro y vidrio en la que salen 18 cerchas metálicas sobre las que se apoya la cubierta de chapa. Los pabellones laterales - entrada y salida de viajeros- de ladrillo rojo y negro y cubierta de pizarra. Fue la primera estación construida en Madrid, todavía no se habían construido las estaciones de Atocha y del Norte.

EL MUSEO
Se hace la visita alrededor de 3 andenes, donde podemos apreciar máquinas de vapor, eléctricas y de gasoil. También hay vagones de viajeros y uno de los primeros talgo. También hay un vagón cafetería. Todo muy bien explicado con la visita guiada.
Así mismo, alrededor de los andenes laterales, hay pequeñas exposiciones de relojes, maquetas, una sala de juegos para niños.... una exposición de objetos relacionados con el ferrocarril y maquinaria para la construcción de las vías.
(diligencia para transportar viajeros de una linea de tren a otra)
CURIOSIDADES
Con la visita guiada, aprenderemos entre otras cosas:
Que el rombo que contiene un número en las máquinas, indica la velocidad a la que podía llegar.
La importancia que ha tenido el TALGO para el desarrollo del ferrocarril en el mundo.
Que TALGO significa: Tren, Articulado, Ligero (construido en Acero), Goicoechea (ingeniero que diseñó el tren), Oriol (empresario que puso los fondos para su desarrollo y construcción)
Que TER significa: Tren Español Rápido fueron trenes de diesel que funcionaron desde 1965 hasta 1990.

Mi impresión
Visita recomendada para ir con niños (aunque algunos papás, les dejen a su hijos toquetear todo sin vigilar si hacen algún destrozo, como he podido comprobar yo in situ).
El precio de la entrada (6€) me ha parecido cara para lo que está expuesto, así que recomiendo ir un domingo que se abarata bastante. Tampoco nos han dado plano ni guía con la entrada (el plano lo he sacado de la página web del museo).
Lo mejor, el guía que con su santa paciencia, ha intentado que sus explicaciones interesaran también a algunos niños un poco inquietos.

Más información en su página web:  Museo del Ferrocarril de Madrid







domingo, 20 de marzo de 2016

Burgos. Triángulo del Arlanza

El triángulo del Arlanza se enclava en un estrecho valle de la provincia de Burgos, bañado por el río que da su nombre, donde abundan las aves rapaces, extensos bosques de sabinas, pueblos  y paisajes que nos evocan los duros años del primer milenio de nuestra era.

Las poblaciones principales que componen este triángulo son Lerma, Covarrubias y Silos; A través de su recorrido, también podemos pararnos para ver otras cosas muy interesantes.
Un fin de semana es ideal para conocer la zona, aunque nosotros preferimos hacerlo en un viernes-sábado, para evitar las eternas caravanas que se originan en las entradas a Madrid los domingos por la noche. Al ser mediados de marzo, pasamos mucho frío, pero no llovió, así que pudimos disfrutar de todo.
Paso a contar nuestra experiencia:
Nos levantamos muy temprano el viernes, con la idea de estar  a primera hora en Covarrubias, primer punto de nuestra ruta. Tomamos la carretera N-I, hasta Lerma; a mitad de camino, como a las 08:30 paramos a desayunar.
Pasadas las 10:00 horas, llegamos a Covarrubias:

Como era viernes laborable, no había muchos turistas, sólo las gentes del pueblo. Aparcamos el coche y nos dirigimos a la oficina de turismo para recabar información; estaba cerrado, así que tuvimos que esperar a que abrieran a las 10:30 h. En la oficina, nos dieron información del pueblo; le pregunté por las visitas guiadas y me dijeron que se realizaban a las 12:00, pero con un mínimo de 10 personas. También nos dijo que la visita guiada a la excolegiata comenzaba a las 11:00 horas.

Como no vimos turistas, pensamos que quizá no se realizara la visita guiada por el pueblo, así que siendo cerca de las 11:00 horas, decidimos realizar la visita guiada a la excolegiata y luego ver el pueblo por nuestra cuenta, ya que llevábamos la guía que a mi siempre me gusta llevar cuando visitamos los lugares. (la guía éstá desglosada en varias entradas en el blog; si estáis interesados, iros a la pestaña de "guias de viajes" y buscar en el apartado de Burgos).
La entrada a la iglesia es gratis, y pudimos ver tranquilamente las capillas, los retablos y los sepulcros esperando el comienzo de la visita guiada que comprendía una pequeña explicación de la iglesia, el claustro y el museo. La visita fue muy agradable, pues sólo fuimos 5-6 personas, y el guía se mostró en todo momento muy solícito.

Vista la excolegiata, hicimos el recorrido por el pueblo a nuestro aire. Quisimos entrar en el Torreón de Fernán Nuñez, pero estaba cerrado por ser una propiedad privada; sólo se puede visitar los fines de semana.
Después nos dirigimos hacia la ermita de San Olav, -a las afueras del pueblo-, que aún sabiendo que estaba cerrada, si nos apetecía ver el entorno y la construcción tan "especial" o moderna. Para llegar hay que tomar la carretera, dirección a San Pedro de Arlanza, y enseguida vimos el letrero que nos indica su dirección a través de una pista de tierra (el camino no está asfaltado, así que hay que ir con un poco de precaución sorteando los baches).



El siguiente punto, fue San Pedro de Arlanza. Como ya dije, se llega por la misma carretera. Al llegar hay una gran explanada frente al monasterio, donde se puede dejar el coche. 

La entrada es gratuita. Cuando llegamos, estábamos solos, así que pudimos ver el monasterio sin prisas. Aunque lo que queda está ruinoso, merece la pena su visita, pues se puede apreciar la grandeza que tuvo. En la actualidad las instituciones están invirtiendo para la consolidación del monasterio. No se podrá recuperar su estado original, pero si rehabilitarlo para darle otros usos. Merece la pena su visita, y aun estando en el estado que está, a mi personalmente me gustó más que Santo Domingo de Silos ( con toda la fama que tiene).

Llegaba la hora de comer y estábamos dudosos , si volver a Covarrubias o dirigirnos a Silos. Optamos por comer en Silos. Nos equivocamos. Silos es mucho más pequeño y en esta época, solo había 4 restaurantes para comer y en mi opinión, un poco caros. Así que os recomiendo comer en Covarrubias que la oferta gastronómica es más extensa.

Volvimos a Covarrubias para coger el desvío hacia Silos. Por la carretera íbamos sólos y como brillaba el sol, disfrutamos del paisaje.

Llegamos a Silos sobre las 14:00 horas.


En Silos, teníamos reservada habitación para pasar la noche en el Hotel Tres Coronas. Lo primero nada más llegar, fue dirigirse al hotel y una vez que nos dieron la habitación, salimos para ver qué restaurante elegíamos para comer. Como la oferta era escasa y cara, nos decidimos por un menú del día en el Mesón Casa de Guzmán.
Cuando terminamos de comer, decidimos dar una vuelta para conocer el pueblo, pues hasta las 16:30 no abrían el Monasterio de Santo Domingo de Silos.

La visita al Monasterio cuesta 3,50 €;  es guiada y se ve el famoso claustro, la farmacia y una sala museo. Terminada la visita, se puede volver al claustro para verlo tranquilamente.
A mi parecer, la visita guiada es corta, pues apenas dura 30 minutos; El guía, aunque tenía buena predisposición, nos daba las explicaciones en un tono aburrido y no saqué provecho de la visita. Hay algunas páginas que circulan por internet, que explican más detalladamente el monasterio. Además, comprendo que el monasterio está habitado por unos 30 monjes y que también funciona como hospedería para hombres... pero creo que deberían enseñar algo más para los turistas. Conclusión: para el precio que pagamos, nos merecíamos haber visto algo más.

Terminada la visita y las compras en la tienda del monasterio, decidimos dar más vueltas por el pueblo, pues teníamos que hacer tiempo hasta las 19:00 horas para escuchar en la iglesia los cantos de los monjes en gregoriano. Visto todo el pueblo y aburridos, con el frío que hacía en la calle, a media tarde nos refugiamos tomando un café en el Hotel Santo Domingo de Silos.

Poco antes de las 19:00 h, entramos en la iglesia para escuchar a los monjes. A la entrada, hay unos folletos para seguir los cantos, yo cogí uno. Con gran ceremonia, salen los monjes, y empiezan sus plegarias y cantos en gregoriano, que ilusa de mi, pretendí seguir con el folleto que cogí. A los 2 minutos, me di cuenta que no tenía ni idea, así que lo cerré y me dediqué a disfrutar. Por cierto, muchas de las personas que asistieron al acto, si sabían seguir el oficio. Dura como media hora y no está permitido hacer fotos.

Finalizado el oficio y con el frío que hacía -ya de noche-, volvimos al hotel hasta la hora de la cena. Cenamos en el bar del Hotel Rural Posada Villa de Silos, a base de raciones. Muy buena la relación calidad-precio. De vuelta, al hotel a dormir, que hacía un "frío que pelaba"

A la mañana siguiente, no levantamos pronto para aprovechar el día. Después de desayunar en el hotel, recogimos nuestras cosas y tomamos rumbo hacia Lerma, último punto de visita.  A la salida de Silos, hay una desviación hacia el desfiladero de Yecla, que finalmente no fuimos, pensando que con el frío que hacía, seguramente estaba todo helado y no íbamos preparados.

Llegamos a Lerma y aparcamos el coche frente al Parador. 

Nos dirigimos a la oficina de turismo, para confirmar que teníamos reservada la visita por la tarde de "Descubre otro Lerma bajo tus pies" a las 18:00 horas y como también queríamos hacer la visita guiada por Lerma a las 12:00 horas, preguntar qué no se visitaba, para hacerlo nosotros por nuestra cuenta. Nos dijeron que lo que no se veía en la visita guiada por Lerma era la parte baja de la ciudad, que es la zona medieval de Lerma.

Salimos de la oficina de turismo y lo primero... un cafecito para entrar en calor y después, el recorrido por la parte medieval, dando un rodeo por la parte baja, hasta los márgenes del río. Poco antes de las 12:00 h. volvimos a la oficina de turismo para realizar la visita guiada que partía desde allí.
La visita guiada cuesta 4 €, pero merece la pena porque entramos en sitios que por nuestra cuenta, no podríamos ver, como la excolegiata y el pasadizo ducal. El guía, maravilloso, estupendo...disfrutaba explicándonos. Un acierto.
Después de hacer el recorrido, empezamos a buscar un sitio para comer. Yo había leído por internet, que alejándonos del centro histórico, se podía comer bien a buen precio y a mi marido le habían recomendado un asador que en su fachada exponía las "tabas del cordero". Al final, nos decantamos por la opción de mi marido... y acertamos.
Menú para 2 personas, con lechazo, ensalada de lechuga, pan, vino y postre casero: total 53 euros. Totalmente recomendado. El rodero estaba exquisito. Si os animáis a ir, recomiendo que reservéis, porque se llena el local enseguida.

Después de comer, nos fuimos al Parador de Turismo, a tomar un café. Estuvimos un buen rato por dos razones: una que es muy agradable el sitio y dos, porque hacía un frío que pelaba.

Para hacer tiempo hasta la hora de la visita por el subsuelo de Lerma, estuvimos dando vueltas, buscando llevar algo para casa... y compramos entre otras cosas, chocolate blanco con coco... nosotros nunca lo habíamos comido. Buenísimo.

Llegada la hora de la visita, nos acercamos otra vez a la oficina de turismo desde donde comenzaba la visita. Ésta consiste en explicarnos la tradición del vino en Lerma, por qué el suelo de Lerma está cubierto de cuevas,  visitando 2 de ellas,  y finalmente una cata de vinos de D.O. Arlanza en el Parador. 
Me pareció muy intersante y distinta; Estas visitas las organizan los meses de marzo y abril desde la oficina de turismo. cuestan 5 €/persona. y durante la cata, en esa ocasión fue a cargo de "Bodegas Arlanza, S.C.P"  con tres tipos de vinos diferentes. Si estáis interesados, entrar en la página de Turismo de Lerma, y podréis encontrar toda la información.

Terminada la degustación, siendo ya las 21:00 horas, nos dirigimos hacia el coche para volver a casa. Contentos con todas las cosas que habíamos conocido.

Fin de la ruta.

Si estaís interesados en mi pequeña guía del viaje, está como ya comenté, desglosada en varias entradas de este blog, así que lo mejor es ir a la pestaña de "Guías de Viajes", y en Burgos, las encontraréis. También os dejo el enlace: