Santo Domingo de Silos se asienta en el valle del Tabladillo, a 1000
metros sobre el nivel del mar, rodeado de altos montes. El paisaje es austero,
pero pintoresco por las formas que las aguas han labrado en las rocas, como el
desfiladero de la Yecla.
La localidad está situada en un
nudo de caminos históricos: La Ruta de la Lana, El Camino del Cid, la ruta del
destierro del Cid y el Camino Castellano-Aragonés.
OFICINA
DE TURISMO
Dirección: Plaza Mayor nº 1
Horario:
Teléfono: 947 390070 Fax: 947 390070
UN
POCO DE HISTORIA
El pueblo nace al amparo de los
pueblos visigodos que en este lugar construyeron un cenobio dedicado a San
Sebastián.
Entre los siglos IX y XI, el
valle, situado en una zona fronteriza entre los territorios cristianos y los
del Califato de Córdoba, sufrió constantes incursiones de Almanzor y sus
tropas, lo que provocó una gran inestabilidad hasta que el Conde Fernán
González va reconquistando los territorios y repoblándolos en forma de granjas
monástico-familiares; sin embargo el monasterio cae en gran decadencia hasta
que en 1041, el rey Fernando I de Castilla envía al monje Domingo Manso,
proveniente del monasterio de San Millán de la Cogolla. Es nombrado abad de
Silos y en 32 años restaura el Monasterio. Alfonso VI, le concede a la abadía
en 1098 la facultad de poblar junto al monasterio, quedando estos colonos bajo
su protección y vasallaje. La villa de Silos, dependió del monasterio hasta
1440, cuando los monjes la vendieron a la casa de los Velasco -condestables de
Castilla- como así lo atestigua el escudo que hay en la puerta de la Fuente.
La villa ha perdido casi por
completo su aspecto medieval pues sólo queda dos puertas, la de San Juan y de
la Calderera y los paños que cierran la huerta del Monasterio.
QUÉ
VER:
El pueblo tiene 3 zonas bien
delimitadas:
- El Monasterio de Santo Domingo y su entorno
- La plaza mayor y la iglesia de San Pedro
- El entramado urbano ceñido por la muralla.
Hay numerosas casas con escudos
mobiliarios, entre otras:
Calle Herrería
En el nº 5 de esta calle está
la casa de mayor antigüedad documentada. En el dintel de piedra de la puerta se
puede leer: "AÑO DE 1683. ALAVADO SEA EL SANTÍSIMO SACRAMENTO"
Casas señoriales de la Calle Condesas
En una pequeña plazoleta hay
una casa solariega con el escudo de caballero de la orden de Alcántara en la
fachada.
La casona contigua, lleva el
rótulo "Casa de Augusto Septién Salesiano".
Haciendo ángulo con esta
plazoleta está la casa donde hoy día se sitúa el Museo de Instrumentos
Musicales; esta casa parece ser era de un caballero que con el grado de alférez
participó en la guerra de Granada. La casona es del siglo XVII que tuvo
diferentes usos, entre otros, cárcel municipal.
(varias casas señoriales)
Museo Sonidos del Mundo
Calle Condesas, 10
Horario: De martes a sábado 10:30 a 14:00 y de 17:00 a 19:00.
Domingos y festivos, solo por la tarde.
Entrada: 1 €
La exposición se distribuye en dos
plantas y se articula siguiendo la clasificación de los instrumentos en cuatro
grandes familias, tomando como base la manera de producirse el sonido y los
materiales que se han empleado en su construcción. Entre
los escudos que flanquean la fachada hace alusión a la "Virgen Inmaculada
concebida sin pecado de origen"
Casa de la calle Santo Domingo de Silos
Frente a la iglesia del
monasterio, esta casa fue una hospedería de peregrinas. En el escudo podemos
leer: " Spes mea, deus" (mi esperanza, mi Dios)
(Calle de Santo Domingo de Silos)
En la plaza Mayor
frente al ayuntamiento y la
Iglesia de San Pedro hay que destacar 2 casonas. En lo que hoy día es el
"Hotel tres Coronas", fue la residencia de un noble de origen
cántabro, Domingo Septién. Algunos de sus miembros fueron escribanos y
secretarios del sector nobiliario de Silos. Luego pasó a ser propiedad de la
Familia Castrillo y se convirtió en farmacia. Luego de varios avatares, se
instaló el Hotel.
(Hotel Tres coronas)
(Ayuntamiento)
Iglesia de San Pedro
En el mismo lugar de la iglesia
actual ya existía en el siglo XI una iglesia dedicada a San Pedro. Posiblemente
se encontraba en el centro de un cementerio y junto al Hospital de pobres,
donde ahora está el Ayuntamiento. Esta iglesia fue ampliada en el siglo XIII.
La nave central está cubierta con 3 tramos de bóveda de crucería y capiteles
con decoración vegetal. El del evangelio, al norte tiene 3 grandes ventanales,
y se cubre con una bóveda angevina de 5 nervios.
Estos ábsides de prolongaban con otras 3 naves góticas de 15 mts. de longitud,
que se derrumbaron a principios de 1580. En 1591, gracias a los donativos de la
comarca se reedificaron los muros, se levantaron las columnas cilíndricas de
piedra y se cubrió con el artesonado de madera que podemos ver hoy.
Retablo mayor: de
1628, barroco con dos cuerpos y remate en el que se puede contemplar un gran
relieve cuadrangular que representa la Visitación de la Virgen a su prima Sta.
Isabel. En el centro, entre columnas corintias, un busto de San Pedro; en los
laterales San Roque y San Lorenzo en el primer cuerpo y San Pablo y San Andrés
en el segundo.
Virgen de la Leche:
escultura en piedra, de estilo flamenco. Está dentro de una hornacina de un
retablo de piedra policromada de 1554.. Representa a la Virgen ofreciendo el
pecho al Niño Jesús. Su expresión de ternura, tiene rasgos nórdicos.
Virgen del Mercado: es la
patrona de la villa. Su nombre puede venir porque tal vez presidiera el mercado
de la plaza del pueblo. Es de estilo gótico del siglo XIII, de madera, que
representa a la Virgen con el Niño Jesús entre sus brazos. Está sentada en un
escabel y sostiene en su mano una manzana, símbolo de la nueva Eva. Su festividad es del 2 de julio con una
fiesta típica en la que danzan 8 niños del pueblo.
Santo Cristo: Obra
del siglo XVI, representa al crucificado con expresión más bien dormida que
muerta. La cruz con gajos de ramas cortadas, sigue el modelo castellano de los
siglos XV y XVI.
Muralla
Del recinto amurallado sólo
quedan algunos paños que cierran la huerta del monasterio y dos puertas, la de
la Calderera y la de San Juan.
(Puerta de la Calderera)
(Puerta de San Juan)
Al lado de la puerta de San Juan existe un gran
manantial que es conocido como "fuente grande", que surte de agua al
monasterio a través de la "fuente del cañuelo" o "del santo"
y que además aporta agua al lavadero cercano"
Convento de San Francisco
Está situado al oeste de
la Villa de Santo Domingo de Silos, en el llamado “pago de Santa María del
Paraíso”, dónde en la Edad Media existió una ermita dedicada a la Virgen bajo
dicha advocación. Fue fundado, probablemente, en 1301 durante el pontificado de
Bonifacio VIII, siendo obispo de Burgos D. Pedro Gutiérrez de Queixada y abad
de Santo Domingo, Dom Juan III. La comunidad franciscana que formaba parte de
la Santa Provincia de la Inmaculada Concepción, la constituían entre veinte y
treinta frailes que permanecieron en el convento hasta la exclaustración de
1835. Su actividad principal era la práctica pastoral en las localidades del
entorno.
El primitivo convento,
del que apenas quedan vestigios y que estaría caracterizado por la sencillez de
las primeras construcciones franciscanas, fue reemplazado en el siglo XVIII por
una nueva construcción dentro del espíritu clasicista. Aparte del claustro, con
arcos de medio punto separados por pilastras clásicas, el espacio más notable
era la iglesia de una sola nave con crucero ligeramente insinuado. La portada,
bastante bien conservada responde plenamente al gusto barroco. Fue edificada
por D. Francisco de Villalobos, canónigo capiscol de la Catedral de Osma. El
templo gozó de gran devoción en la comarca por conservar entre otras famosas
reliquias una parte del hábito de San Francisco.
Tras la desamortización
pasó a manos privadas hasta que en 1890 sus ruinas fueron adquiridas por la
Comunidad Benedictina del Real Monasterio de Santo Domingo de Silos. Desde el
abandono de los franciscanos hasta 1990 la fábrica del convento se utilizó como
cantera de material de construcción para numerosas obras, como los dos puentes
que conducen a la Yecla o incluso para reparar el ángulo noroeste del propio
monasterio benedictino.
En 1990
la Comunidad Benedictina, con la colaboración de la Asociación Amigos de Silos
y la financiación, en su mayor parte, del INEM comenzó las obras de
restauración de acuerdo al proyecto redactado por el arquitecto D. José María
Pérez González (Peridis) y constituyendo para ello una Escuela-Taller. Las
obras se interrumpieron en 1996 una vez finalizada la restauración de la
iglesia. A partir de 2006, la Fundación Silos asumió la restauración total del
convento, así como su rehabilitación y equipamiento. La inauguración y apertura
al público de sus instalaciones tuvo lugar el día 7 de noviembre de 2009.
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